25/11/2017    IV Festival de Copla

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Al igual que otros estilos musicales, el origen de la Copla es algo incierto, pero entre ellos, cabe destacar que tuvo su origen alrededor de principios del Siglo XX en Andalucía, concretamente en los patios andaluces donde las familias y amigos se reunían para contarse los chismorreos, desventuras y aventuras amorosas.

En las coplas se narran historias muy apasionadas, que pueden ser tristes o con un gran contenido sentimental,  en donde el tema principal es el amor y el desamor, así como en algunos casos la muerte.

Dieron las 20,30 horas en el reloj y todo estaba dispuesto para comenzar un nuevo Festival de Copla, tradicional en la Casa de Andalucía en Zaragoza. Sonido, luces, escenario, atril y los cantantes esperando el sorteo para ver cual era el orden de actuación. El salón estaba completamente lleno, muchísima gente de pie agolpada y buscando un hueco para poder ver el escenario.

2Era el IV Festival de Copla en nuestra sede y como en ocasiones anteriores, es un acto muy esperado por los socios y amigos de la Casa de Andalucía en Zaragoza debido al alto nivel de los participantes. Entre ellos, algunos con bastantes horas encima de un escenario como Pepe Romero y Lidia Tinoco que con muchas “tablas” hicieron las delicias de un público entendido en estas lides.

 Tras una breve presentación a cargo de Pilar y Fina, saltó al escenario Salvador Requena para romper el fuego. Posteriormente, uno a uno fueron interpretando las canciones que ellos mismos habían elegido y que desde hacía tres semanas, en las tardes de los jueves, habían ensayado con mimo y sobre todo, con muchas ganas de agradar a socios y amigos de la copla. Todos ellos demostraron con gran entrega su amor a la copla, su arte y sacaron de su corazón el sentimiento que cada canción llevaba dentro.3

Pudimos disfrutar con canciones como: “María la portuguesa”, “Pena, penita, pena” de los maestros de la Copla Quintero, León y Quiroga, “Viva el pasodoble” y muchas más.

En total se presentaron 16 cantantes de manera individual que nos hicieron pasar más de una hora momentos imborrables. Varios intérpretes, con muchas horas de escenario y micrófono expresaron su buen saber. Para algún otro, era la primera vez que cantaba frente a tan numero público y los nervios tuvieron que apaciguarlos con valentía y pundonor.4

Cerró tan maravillosa velada Pilar y Fina interpretando a dúo “Campanera” con gran estilo, entregando a cada cantante un diploma con su nombre como recuerdo de su actuación y un clavel.

Después de tan maravillosa tarde de Copla, pudimos degustar de una cena de amigos donde compartimos aquellos momentos de alegría, recordando las letras, canciones y nervios que los participantes vivieron en sus venas, pero que, después de haber pasado, estaban orgullosos de compartir con nosotros su amor por la Copla.5