LA PRESIDENTA DE LA JUNTA DE ANDALUCIA VISITA LA CASA DE ANDALUCIA EN ZARAGOZA.

El pasado día 27 de Noviembre la casa de Andalucía en Zaragoza recibio la visita de la Presidenta de la Junta de Andalucía Susana Díaz, tal como se había anunciado a las ocho de la tarde llegaba Susana Díaz a la sede de este centro regional andaluz, siendo recibida todavía en la calle, por el Presidente de la entidad Federico Tinoco Janeiro quien le entrego un ramo de flores.

Susana Díaz llego acompañada por el Secretario General de los socialistas en Aragón y tras una rueda de prensa entre viento y chispeante lluvia, en una desapacible tarde, procedió a entrar en la Casa de Andalucia y en la mima puerta la esperaban todos los componentes de la Junta Directiva que fueron presentados a la Presidenta por Federico Tinoco y autoridades tales como el Alcalde de Zaragoza Juan Alberto Bellohc, el Vicealcalde Fernando Gimeno y el candidato a la alcaldía Carlos Pérez Anadón, entre otros concejales y diputados. Ya en el salón de socios fue recibida con aplausos y piropos por parte de los andaluces y no andaluces que la esperaban, en un acto que fue prácticamente improvisado pero que reunió a unas 250 personas.

Una vez Susana Díaz sobre el estrado y siempre acompañada por las autoridades anteriormente citadas y el Presidente de la Casa de Andalucia, el conductor del acto Vicepresidente y delegado de Cultura y Comunicación José Maria Arilla, después de comentar el motivo que los congregaba, no pudo ocultar que aprovechaba la oportunidad para manifestar la satisfacción que le producía el poder contar con la presencia de la Sra. Presidenta. Seguidamente anuncio las palabras del Presidente de la Casa, quien hablo de la buena acogida que los andaluces han tenido y tienen en Aragón donde tan fácil les es integrarse, de las actividades que se realizan para fomentar la cultura andaluza en esta Comunidad Autónoma y de la recepción de la cultura aragonesa por parte de los andaluces, a la vez que manifestó la necesidad de colaboración y ayuda económica por parte de la Junta de Andalucia. Finalizo agradeciendo la visita a la Presidenta y diciendo, este es un día histórico para nuestra Casa, es como un regalo de Reyes adelantado.

A continuación tomo la palabra Susana Díaz, «me siento como en mi propia casa porque estoy en mi casa» fueron sus primeras palabras. Destaco la naturalidad de los andaluces, la concordia, el ser abiertos, distendidos y asequibles, valores que según ella necesita este país. Sobre los recursos económicos Díaz reconoció que a los centros regionales andaluces les hacen falta y anunció que este año habría convocatoria, pero -dijo- lo primero es lo primero y es la sanidad, la educación,… tengo que blindar primero el colchón familiar.

Después se paso a la imposición de la Insignia de Oro de la Casa de Andalucia en Zaragoza a la Presidenta de la Junta de Andalucía, previa lectura del acta de la Junta Directiva en que se concedió y en la que el Presidente recordaba que en su día se le había concedido a Javier Lamban y todavía no se había llevado a cabo la imposición por lo que se acordó entregársela en este mismo acto.

Así en primer lugar el Presidente Tinoco impuso la insignia a Javier Lamban y seguidamente a Susana Díaz entre atronadores aplausos. También las mujeres de la Junta Directiva, Vocal de Juventud Maria Enciso, Vocal de Apoyo Maricarmen Vázquez y Vocal de la Mujer Victoria Chamorro, le entregaron a la Presidenta una Virgen de Pilar pintada sobre cerámica codobesa de La Rambla.

Foto de familia, autoridades y Junta Directiva de la Casa de Andalucía al completo junto a Susana Díaz e inmediatamente el coro rociero «Nostalgia Andaluza» interpreto el Himno de Andalucía, canto al que se sumaron gran parte de los ahí presentes incluida la propia Presidenta, emociones contenidas y otras no tanto, pues fluyeron algunas lagrimas sobre todo de los mas mayores.

Susana Díaz firmo en el Libro de Honor de la Casa de Andalucía y entrego su presidente un libro que trata sobre a comunidad que preside, y a continuación se sirvió un vino andaluz, del que ella no pudo disfrutar pues prefirió atender a sus paisanos, abrazos, besos y fotografías con todos, estuvo simpática, cercana, abierta, asequible y guapa, cualidades de una buena andaluza.